Lo tenía en la chistera.

Una noche serena con lluvia y catastrófica tormenta. Una noche en la que me sienta la princesa del mal. Que los bohemios se la den de artista. Una noche para yo sentir el veneno como la capitana cantando al son de Araka. Sentir el espíritu indomable de la mujer de un paria. Una noche en la que el más golfo caiga en mis redes.  En la que pueda ser la inmortal que fuma de la pipa de la paz. Una noche en la que acabo siendo desterrada como ángel caído y una condenada gritando libertad.

Una noche para escribir.

Estoy esperando una noche de lluvia, de viento y mal tiempo pasarla en mi habitación.

Con la puerta cerrada, música bajita y poca luz. Mis papeles por el suelo, los bolígrafos y los lapices en la mesilla.

Pasar la noche hasta las tantas leyendo cosas que hace tiempo escribí, escuchando mis coplas de carnavales.

Quiero pasar un rato a solas con mis cosas, con mis recuerdos.